domingo, 26 de julio de 2009

21ª etapa: Montereau Fault Yonne - Paris Champs-Élysées 164 km

Ahora que la patronal ha roto las negociaciones por la concertación social en mi país, es hora de hacer un balance de este Tour. En cualquier caso, es mi balance.
En pocas palabras: los currantes se ponen de acuerdo, hacen su trabajo. Independientemente de lo que digan sus jefes. Es en el tajo, en el día a día, el lugar en el que se fraguan las solidaridades. Solidaridades egoístas, solidaridades pasajeras. Solidaridades, al fin, para conquistar una meta. La que cada uno tenga. La que todos esperan: acabar la tarea. Esa y no otra es la finalidad de un trabajador.
Los millones de personas que han estado durante toda la ronda o bien recostados en sus sofás o bien apostados en las márgenes, durante horas, a menudo desde el día anterior, no significan sino el reconocimiento entre iguales. A ellos, a nosotros, a mí, nos da igual que Bruyneel sea más amigo de uno que de otro. La carrera del norteamericano ha sido fantástica, pero la de Contador lo ha sido más. Y la carrera de Pellizoti, y la de los Schleck, y la de Wiggins, del que nadie sabe qué demonios pintaba en medio de todo esto. Ha habido frustraciones, ha habido caídas (no una, ni dos, sino tres veces se cayó Menchov en la etapa de los Bernardos). También decepciones, nadie sabe dónde está Evans. Ha habido Historia, ahí está Gárate. Ha habido orgullo y expiación pública, ahí está Sastre.
A menudo se nos olvida, será porque todos queremos ser jefes, que los problemas de Alberto Contador no han venido de sus compañeros. Han venido, como siempre, de la organización del trabajo. Los problemas de Alberto no han venido porque Armstrong estuviera allí, qué carrera la del norteamericano, sino de que él, Contador, no tenía claro que su equipo fuera a trabajar correctamente. Es decir, ha carecido de la certeza de que su equipo trabajara para la victoria del mejor de entre ellos (Contador se ha sentido como los trabajadores de la Opel de Zaragoza, trabajando bien, produciendo buenos coches, y a la espera de que los directivos, esos individuos, decidan qué camino va a tomar la factoría). Eso no es responsabilidad de los curritos, de los tíos que se chupan cada día un montón de kilómetros. Eso es responsabilidad, única y exclusivamente, de sus jefes. En este Tour, Bruyneel se irá contento porque ha metido a dos de los suyos en el podio. Mediocre. Hubiera podido tener cinco en las primeras posiciones si Leipheimmer no llega a caerse.
Como en todas las empresas, ha tenido que ser un currante, Contador, el que decida por dónde tienen que ir las cargas de trabajo.
Un saludo. Mañana, verano.

(Nota: la etapa del Ventoux se puede interpretar, también, como una tragedia clásica: el novato ayudando al viejo guerrero, para que su triunfo, el del novato, fuera más grande. La foto del Tour 2009 ha sido, sí, histórica).
atumbabierta
*****


Contador tiene muchos tours en sus piernas, dicen.
De momento, dos.
Mi enhorabuena para él y para todos los ciclistas que durante 21 días han transformado el esfuerzo, la energía y la técnica en belleza.
Mi desprecio para mercaderes y oportunistas.
Si yo tuviera un coche escoba… cuántas cosas barrería.

Cronoescalada
*****

Se habrán preguntado durante todos estos días cómo coño conseguí salir de aquel hospital de Gotemburgo en el que también estaba mi cría, y sobre todo cómo pude dar esquinazo a los chapuzas de la Sección. Bueno, como han aguantado con paciencia a Atumbabierta y a Cronoescalada durante 21 días, hoy desvelaré el misterio, y después cerraré mi colaboración con un breve comentario sobre esta última y jocosa etapa del Tour 2009. En realidad fue muy sencillo. Sólo necesitaba contactar con el PET (Servicio de Seguridad e Inteligencia danés), me debían un favorcillo. Lisbeth me proporcionó la baza, ella repetía un nombre en sueños: Plague. Averigüé quién era en los ordenadores de recepción, contacté con él y se avino a trabajar para mí ante la amenaza de que pudiera pasarle algo a su querida amiga. Esa misma noche un agente del PET daba el cambiazo por un doble, el pobre desgraciado que trajeron se parecía bastante a mí, luego me sacó de la puta Suecia, y hasta hoy. Fácil. Tan fácil como ha sido la carrera para el vencedor. (Ha resultado difícil lo ajeno a la carrera: hoteles, director, prensa, y envidias enquistadas). Hoy en París todo se vende, hablan los políticos, los patrocinadores, los arribistas…, pero a pesar de esta basura, “ahora ya no me lo pueden quitar”, ha dicho un feliz Contador que ha conseguido cabrear a Armstrong. Ay, sólo a esas mentes pensantes de RTVE se les pude ocurrir un colofón así al papel de su paisano en este Tour: ¡una entrevista a Bruyneel! No me ensañaré porque hoy han hablado de mi Verdugo. La rubia me ha ofrecido un blog personal para escribir sobre mis andanzas (me lo pensaré), luego se ha marchado a Moscú, quizás el próximo verano vuelva con sus combinados. Y aquí nos hemos quedado Sergei y yo riendo la gracia. He llamado de nuevo al tal Plague y le he encomendado otro trabajito. Esta vez no ha sido un error de la organización del Tour (vaya bronca le caerá al gordi de Hinault), simplemente me apetecía tener un detalle con mis amiguetes del PET danés y por eso ha sonado el himno nacional de Dinamarca en los Campos Elíseos. Aunque las banderas no coincidían, ha quedado bonito, ¿verdad? Espero que ellos hayan apreciado mi gesto, y ustedes mi broma.
Zalachenko

*****

20ª etapa: Montélimar - Mont Ventoux 167 km

Las más de siete mil personas que el pasado lunes, día de descanso, participaron en la ascensión cicloturística al Mont Ventoux nos dan una idea del mito y de la capacidad de ilusión que tienen el Tour y el ciclismo. A las 15:00 horas se persona Rajoy en Eurosport, como “gran aficionado” y para hablar de políticas sociales aplicadas al deporte. Y Chozas lo publicita. Cambio de canal y me refugio en Perico. No hay como los valores seguros.

Llegando a la cima están previstos vientos de setenta kilómetros por hora con ráfagas de hasta ciento diez. Veremos. Veremos a ver si el hidroavión no les echa el agua a estos. Por cierto, parece que Alonso al final tiene la pole en Hungría.

Los del Astana se defienden atacando. Quedan dieciocho kilómetros y se han liado a formar abanicos, destrozando el pelotón. Veremos. Juan Manuel Gárrate va escapado por delante. Como suban esto en grupo será curioso. El pelotón ha descolgado al final a veinticinco corredores y sigue recortando las diferencias con la cabeza. Muy fuerte tiene que sentirse Armstrong para llevarse a los Schleck con ellos. De otra manera no se entiende la estrategia. Entre trescientas cincuenta mil y quinientas mil personas se agolpan en las márgenes. Un auténtico arco del triunfo, un túnel humano en honor de los de la bici. Ahora tira el Saxobank.

Se va Frank Schleck y detrás de él salta Armstrong. Ahora le toca a Andy, y detrás Alberto. En cuatro kilómetros les han comido dos minutos a la cabeza de carrera. Enfocan la cabeza, la mirada perdida de Garate y Martin. Se va Garate a falta de un kilómetro. Vamos. Martin reacciona. Garate ha entrado en la historia del Tour. La próxima vez que el Ventoux sea final de etapa, su imagen estará en la torre de comunicaciones que corona el Monte de la Luna junto a las de Gaul, Poulidor, Merckx, Thevenet, Bernard, Pantani y Virenque. Es increíble, pero la wiki ya está actualizada.

Contador se felicita de haber terminado, y ganado, “las dos carreras”. Ya ha pasado la época de Todo lo Malo.

Mañana, Montereau-Fault-Yonne – Paris Champs Élysées. Ahora, el TGV y a Paris.

(Nota: esperemos que Massa pueda correr mañana, después del tortazo que se ha llevado. Y enhorabuena a Horrillo, que se quejaba el hombre de que su equipo no había ganado todavía).

atumbabierta
*****
Contra un imperio
el maillot amarillo
de Contador
cronoescalada
*****
Entre el miedo y la fatiga, la etapa más emocionante del Tour se quedó en nada. No obstante, dio lugar a algo interesante, la clasificación general ya es definitiva (lo de hoy debe ser paseo honorífico para el vencedor), y observando en la web del Tour dicha clasificación, veo que nuestro compadre Yauheni HUTAROVICH ha conseguido el farolillo rojo. Enhorabuena, hombre. Has acabado con la racha de Wim Vansevenant, que llevaba el tío tres seguidos, su casa se parecería ya a ese burdel de Ámsterdam que me encanta. Yo solía citarme en las estaciones centrales para efectuar intercambios arriesgados o para recibir encargos. Siempre han sido un lugar seguro a causa del gentío y del trasiego. La sensación que empieza a dejarme este Tour es parecida: gentío, trasiego, y las lucecitas rojas del último vagón que se alejan en la oscuridad.
Zalachenko
*****

sábado, 25 de julio de 2009

19ª Etapa: Bourgoin Jallieu - Aubenas 178 km

Dos cuestiones.

El jueves, Contador ganó sin pinganillo, sin referencias desde el primer control. “Iba concentrado”, dice. Bruyneel no lo siguió a él durante la carrera.

La otra. Rectificación, no es que ayer le tocara el coche en la llegada a meta. Lo que ocurrió fue que casi se parte el cuello intentando ver los tiempos: lo dicho, no llevaba pinganillo.

La etapa va rapidito. A las 15:00 llevan más de la mitad del recorrido. Vemos las imágenes del briefing del Astana en el autobús, antes de comenzar. Buen rollito y buena comunicación. Y esta ha sido la tónica de la etapa. Una más para Cavendish, la quinta.

Mañana, Montélimar-Mont Ventoux. Esto puede ser como un orgasmus interruptus, de tanto esperarlo. Veremos.

(Nota: un abrazo a Horrillo, que ayer ganó su contrarreloj).
atumbabierta
*****

(Voz inglesa).
1. m. Cavendish, 19ª etapa: Aceleración que realiza un corredor en un tramo determinado de la carrera, especialmente en la llegada a meta para disputar la victoria a otros corredores.
2. m. Contador, 20ª etapa: Esfuerzo final que se realiza en cualquier actividad.
Cronoescalada
*****

No os preocupéis, que cuando Rusia me declaró agente fuera de control para desecharme, no sólo pude levantar cabeza, sino que devolví golpe por golpe al ofrecer mis servicios a Suecia. Vosotros habéis luchado por vuestros colores, habéis animado el cotarro y aunque os hayan arrancado vuestros dorsales, volveréis a caminar y a disfrutar golpe a golpe, os lo digo por experiencia. A la rubia moscovita no le interesa mucho el ciclismo, pero nos ha preguntado a Sergei y a un servidor sobre nuestro pesar. Los naranjitos Amets Txurruka y Alán Pérez han quedado eliminados por fuera de control. (Paradójicamente Astarloza y mi Verdugo entraron con los de alante). Estamos tristes, sí. Amets y Alán se han vaciado, andaban lesionados, han intentado llegar dentro de plazo, y los jueces de este Tour han pasado de ellos. Sólo restaban dos etapas para alcanzar París, el equipo naranjito ha sido el verdadero animador de esta aburridísima edición, pero aún así no ha habido conmiseración. ¿No les parece a ustedes una injusticia que quieran eliminarnos a todos aquellos que coleccionamos heridas por nuestra patria? Ojalá les dé a estos jueces de mierda un cólico miserere.
Zalachenko
*****

viernes, 24 de julio de 2009

18ª Etapa: CRI Annecy-Annecy 40.5 km

Dice Chozas hablando del último arreón de Contador ayer en la Colombière y de menear la higuera: “El único higo que se cayó fue el de Kloden. No pasó más. Alberto lo vió y se paró, y ya está.” Kloden es el tipo que le ayudó a ganar el Giro a costa de una pulmonía, el que le ayudó a enganchar con el pelotón ayer, cuando el pinchazo. El que le ayudaba a quitarse el chubasquero y el que le suministraba las barritas y los geles. Ayer a Kloden no le dió tiempo, lo vimos, a tomarse las barritas al bajar del Romme. A Kloden, Armstrong, en esta mismo valle, le arrebató al spring la etapa, para humillarlo, en un Tour en el que Kloden acabó segundo. Contador, ayer, bajó la cabeza al cruzar la meta.

Bueno. La etapa de hoy no merecerá más comentario que el resultado. Esperemos. La locomotora de Pinto le ha sacado 56” a Kloden, 1,30” a Armstrong y distancias similares a Wiggins y los Schleck. Por cierto, vencedor de etapa Alberto Contador. A pesar del atropello -literal- del coche del juez principal.

Mañana, etapita: Bourgoin-Jailleau – Aubenas. Una etapa en la que hay más que perder que ganar.

(Nota: tengo que visitar Annecy)
atumbabierta
*****

Los que vinieron a hacer negocio ya lo han hecho y los que vinieron a correr y dejarse la piel también.
Las últimas estapas nos permiten adivinar algunas de las claves del próximo Tour: los protagonistas que nos harán vibrar, las serpientes que ya no se arrastrarán más.
La contrarreloj de ayer, sin embargo, nos lleva al pasado, al rastro enorme y discreto del mejor: Indurain.
Cronoescalada
*****

Estuve en Pinto y en Madrid a finales de los 60. Allí conocí a la madre de la rubia moscovita, se llamaba África de las Heras. Ella era una diosa dentro del mundillo del espionaje, por eso tardé en centrarme durante la primera cita. Me encomendó dos misiones, la primera que destruyera toda la documentación que existía sobre ella en la Dirección General de Policía de Madrid. Los fascistas secuestraron buena parte de los archivos del PCE, pero desconocían su valor. No me resultó muy difícil acabar con su rastro en España. En cambio, la segunda misión fue una putada, me ordenó que cuidara y entrenara a una mocosa rubia. Bueno, aún estoy en ello, pero ya no sé quién cuida de quién. Ayer la exhibición de Contador hizo desaparecer el rastro baboso de Armstrong que se ha quedado por ahí, entre Pinto y Valdemoro, haciendo de mercachifle de chips tejanos; ahora el maillot amarillo tiene otra misión, cuidarse para sobrellevar las cicatrices en esta puta contrarreloj de la vida.
Zalachenko
*****

jueves, 23 de julio de 2009

17ª Etapa: Bourg Saint-Maurice-Le Grand Bornand 169.5 km

Tiempos de feeling, Guardiola y Eto'o no lo sienten. Hay un no-feeling entre Alberto Contador y Bruyneel. Bueno. Es bonito ver cómo en el deporte profesional sigue habiendo sentimentales.

Bonita la etapa de ayer, movida, interesante y con final feliz. Veremos hoy. Según el mismo Alberto comentaba, ésta es la etapa más difícil. Sensacional la arrancada del americano en el Bornard pequeñito. Consiguió acojonar a amigos y enemigos. ¿Qué pinta Wiggins en todo esto?Veremos. Nada está escrito. Como dijo el Capitán Brannigan, “cuando juegas al ajedrez, no puedes dejar que el enemigo vea tus fichas”.

Por lo pronto, en la primera subida llueve. Todo el mundo con chubasquero y a bajar despacito. A mitad del ascenso al Salsies, el Astana se abre y deja de tirar, vaya cambio de rueda le han hecho a Contador. Bueno, ya se ha reintegrado. Después del avituallamiento a Sastre le tienen que engrasar la cadena. ¿Presagio o augurio?

Ahí va Sastre, al comienzo del Col de Romme. Empieza a dar hachazos para romper el grupo del líder. Del Astana aguantan Contador, Armstrong y Kloden. Salta Armstrong a por Frank Schleck, haciéndole de puente a Alberto. Saltan Sastre, Contador y Kloden. Salta F. Schleck, ahí está el americano a por él. Impresionante. Este es el puerto más débil de los dos que quedan. La que ha liado Sastre. Al final, la escapada buena: Contador, Kloden y los Schleck. A 2'49” coronó Sastre. Vamos a por La Colombière. Sastre pincha al empezar la bajada. Ahí va Alberto, a coronar. No le ha servido sino para dejar a Kloden. La que ha liado Alberto. Ahí va Lance, deja atrás a Wiggins. General: Contador, Schleck y Schleck. No vemos a Carla Brunni.

Mañana, la contrarreloj. Annecy-Annecy, cuarenta y tres kilómetros y medio con una tachuela de tercera casi al final.

(Nota: un saludo a Voigt, que parece que no tiene nada roto).
atumbabierta
*****

Ahora que el tour es tour, que el líder es líder y los hermanos son hermanos.
Ahora que ni el calor, ni la playa, ni el sopor nos despegan de la pantalla.
Ahora que no me arrepiento de este cuaderno escoba, lo único que importa es la sospecha y la traición.
Llegamos al final del trayecto y la prensa también quiere ceñirse el maillot amarillo.
Cronoescalada
*****

Y la araña se zampó a la moscarda. Por mucho que haya pataleado, no ha conseguido zafarse de la tela de Contador. Aquí mucha gente pensaba que el Tour era una fiestecilla de amigos preuniversitarios que se pajean comunitariamente, o una de esas putas películas románticas con historias cochambrosas y sobadas que presentan un final tan feliz como irreal. No, la Naturaleza no tiene final feliz. La araña come. Y no hay guión: o te buscas la vida o se te acaba. Me parece de puta madre que traten al líder del Tour como si fuera un disidente, ya dije que me sentía identificado en cierto modo, pero es que salirse del guión consiste precisamente en eso, en disidir. Y si no se puede porque no hay fuerzas, pues al jodido rebaño: "Me siento más parte del pelotón", dice Armstrong en la entrevista de El País. Claro, a la fuerza ahorcamos. (Por cierto, Verdugo le ha comido otros 4 m a Larsson). Y otra cosa: ¿qué pasó en la tercera etapa? ¿Ya nadie lo recuerda? El Astaná tirando en contra de Contador y Armstrong ganando 41 s, para que todo el mundo se resignara a decir "es que Alberto tiene que espabilar", pues ya ha espabilado, cojones. De momento los tres primeros son los más hambrientos. Que no hemos venido a unos juegos florales a ver quién hace el mejor twitter, hostias.
Zalachenko
*****

miércoles, 22 de julio de 2009

16ª etapa: Martigny-Bourg Saint Maurice 159 km

El día de descanso, Sastre afirma que la prensa ha fabricado ídolos y que a él no se le ha respetado. Bueno, la verdad es que tampoco se le ha visto mucho como para tener que respetarlo. O no.

Hoy el día de los Bernardos, el Grand, el Petit y el Santo. Por lo pronto Egoi y el Cance, van escapados. Al principio del puerto saltan Txurruka y Pellizoti a por ellos. El italiano corona el primero San Bernard. Entramos en Italia, el valle de Aosta. A causa de estos ochenta y ocho kilómetros Alejandro Valverde no ha podido estar aquí.

Bonita carrera la de Pellizoti y Karpets. Lo siento por Egoi, bien por Astarloza. Antón levanta los brazos al paso por meta. Mikel Astarloza dedica el triunfo a su equipo: “yo siempre digo que soy un líder patético. Siempre están trabajando para mí y nunca gano.”

El Astaná sigue arrollando, mete el piñón y pasa la apisonadora por la carrera. Lo que todavía no sabemos es en beneficio de quién, por ahora, exclusivamente en beneficio del mismo Astaná. Evans a siete minutos, Menchov perdido. Únicamente resiste Schleck.

Tanto correr para no movernos del sitio. Mañana Bourg-Saint-Maurice – Le Grand-Bornand.

(Nota, qué costalada se ha dado Voigt).
atumbabierta
*****

Victoria en solitario, única posibilidad para el corredor sin sprint.
A su espalda, un hombre roto sobre la carretera y el hilo del pelotón enhebrado por la diferencia.
Maillot de lunares para la soledad, la frustración y el dolor.
Cronoescalada
*****

Muchos gudaris murieron en bacaladeros luchando contra los acorazados fascistas. Embarcaban en Pasaia o Pasajes, como quieran, y allá que se iban con sus cantos ancestrales a ser carne de pecio. Mikel Astarloza se fugó con la partida y luchó, pero esta vez no se resignó a ser pecio inútil y por eso ganó. Sergei me dice que este chicarrón padece muchos complejos. Creo que esta victoria se los habrá curado. Ahora puede estar más tranquilo para atacar el maillot de la montaña y una buena clasificación final, tal vez entre los ocho primeros... Hasta que empieza la etapa nos entretenemos en el jardín con las caipiriñas de la moscovita y echando moscas y otros bichos a una tela de araña. Sensibilidad, geometría y paciencia. En este Tour hay otra araña, sensible, calculadora y paciente: se va comiendo sus presas con deleite, una a una, sin ninguna prisa, y se ha guardado a la más gorda y jugosa para el final. ¡Buen provecho!
Zalachenko
*****

lunes, 20 de julio de 2009

15ª Etapa: Pontarlier-Verbier 207.5 km

Entonces en Besanzón vieja ciudad española
Lanzado como un grano a merced del viento
Nació de sangre bretona y lorenesa a la vez
Un niño sin color, sin mirada y sin voz

Victor Hugo, Las Hojas de Otoño.

Victor Hugo nació en Besançon. También Fourier, Proudhon y los hermanos Lumiere. Ayer acabamos allí, esperemos que la capital del franco-condado estimule una vez más a la historia. Veremos.

Pues sí. Una vez más, la carretera -la vida- pone -parece- las cosas en su sitio. Todo ha salido según el guión previsto. Una escapada larga, Astarloza ha llegado a estar líder durante más o menos una hora. Y luego, la escapada buena, la arrancada de Contador y el maillot amarillo. ¿Qué demonios pinta Wiggins en esta historia?. Sastre va por el puesto duodécimo, creo. Bueno. Luego dicen que las etapas anteriores eran las monótonas. No sabemos si lo del americano es o no es. Nos da igual.

Debe ser el Tour, éste, de más rendimiento en carretera. La velocidad media, en una etapa de media montaña con llegada en alto ha sido de casi cuarenta y un kilómetros. A los del Astaná les digo que se guarden de las calendas de julio, la falta de Lipheimmer puede ser decisiva en las etapas que les quedan. Hace dos días tenían cuatro candidatos al podio. Hoy únicamente les queda uno fiable y alguno posible.

Mañana, descanso. Playa y siesta.
atumbabierta
*****

Cerrar ojos,
apretar dientes,
reconocer el momento,
desconectar,
huir.
Soledad drenando arterias.
Soledad alimentando músculo.
Soledad desconfigurando el mapa de posibilidades.
Regresar,
tomar contacto,
reconocer la victoria,
separar dientes,
abrir ojos, corazón y brazos.

Cronoescalada
*****

En marzo de 1975 hablé con Bobby Fischer y le dije cómo estaban las cosas. Creo que tomó la decisión correcta. No se presentó a defender su cetro mundial de ajedrez, y en abril el nuevo rey fue el camarada Karpov. Paradójicamente, la leyenda del norteamericano se agrandaba: demostró ser el mejor y no necesitaba más, como yo le había explicado. Lo que no imaginé es que se asustara tanto como para esconderse de por vida. Aquella fue mi pequeña contribución al mito. Y Lance Armstrong también era un mito hasta ayer. Sergei y un humilde servidor no se explican cómo la CIA ha permitido que el mundo entero pueda ver a un símbolo de las barras y estrellas arrastrarse por Verbier con esa cara de pánico. Eso no puede ser bueno para una nación que vive de los sueños y de los ídolos mediáticos. Desde este coche escoba aconsejamos a quien concierna que lo convenzan para que se baje de la bici, si no quieren hundir a EEUU en una semana de pesadilla y regomeyo. ¿Alguien se imagina a Bobby Fischer de analista de Kasparov? ¿Alguien soportará a Lance Armstrong de aguador amargado? Lo avisé, Armstrong no volvería a pisar la Luna..., en cambio Bobby permanece en ella. Y al margen de estas reflexiones de soldado retirado, tengo que reconocer mi satisfacción: Verdugo le sacó un minuto a Larsson; y Contador se arrancó el cable del pinganillo cuando atacó. Como dice el poeta Powerade "el corazón de los hombres se mueve de forma involuntaria".
Zalachenko
*****

domingo, 19 de julio de 2009

14ª Etapa: Colmar-Besançon 199 km

Regomeyo tendría que darles, parecen no darse cuenta pero las tumbas ya están abiertas. Están abiertas desde el principio de este Tour. Y con el transcurrir de las etapas, cada individuo, cada equipo, ha ido agrandando la suya. Como en toda gesta, es inversamente proporcional el tamaño de la tumba, la tuya, a las dimensiones del monumento triunfal de tu adversario. En la del Astaná puede caber todo el equipo: si no gana uno de los suyos será una fosa común. Pero también hay lugar para los nichos particulares, para los columbarios de sus cenizas. Que lo recuerden los que van siendo eternos aspirantes (Sastre declara en el control de firmas: ”estoy en el final de mi carrera y he venido a ver el Tour. A ver cosas que no había visto antes”) . En el deporte no hay moral: gana el que gana. No se trata de justicia. Gana el Mejor, no el Bueno.

No se trata de justicia, pero por lo mismo hay ídolos. Pase lo que pase, el americano tendrá un triunfo, ya tiene el derecho al mismo, aunque, como a Mario, se lo nieguen. Da igual que abandone hoy, o mañana, o pasado. Da igual que se derrumbe en el Mont Ventoux. Porque está creando el material del que se nutren las leyendas.

Por lo pronto, en ésta etapa no hay ningún maillot portado por un español, lo cual es novedad. Diluvia. Está haciendo un verano raro. Donde estoy el levante, pero un levante casi frío, norteño, asola las terrazas y las playas. Corren por el final sur de la Alsacia, en las estribaciones de la Selva Negra. Los campos y los bosques son fértiles. El tiempo frío y desapacible. César abrió camino entre estos bosques, cuenta Suetonio, para desmoralizar a los celtas, matando los árboles a los que adoraban. En el punto kilométrico ciento uno, Hincapie es el líder virtual y Moreau se ha escapado para abrazar a su familia. Un motorista ha atropellado a una señora y la señora ha fallecido. Hincapie sigue líder veinte kilómetros después. Los del líder, están comiendo a estas horas. Bueno, a treinta kilómetros están a menos de siete minutos, el AG2R debería trabajar o mañana habrá dos equipos peleando por el liderato. Ivanov, al final ha sido Ivanov. Bueno. La general. Nocentini, Hincapie, Contador y Armstrong. Más a pelear.

Desde el país de la rubia, mañana Pontarlier-Verbier, llegada en un falso alto. Etapa test, dice Chozas. Veremos. Una oportunidad más, una siesta menos.

(Nota: dieciocho de julio, trece años hace que José Manuel Fuentes, El Tarangu, se fué a disfrutar de su triunfo.)
atumbabierta
*****

Al despertar, Nocentini todavía estaba allí.

No haré Hincapié
en el aburrimiento,
quedan los Alpes.

El sueño del tour, provoca haikus.
Cronoescalada
*****

Cuando vimos que Ivanov iba entre los escapados, supimos que no habría apuestas. Su tocayo, el tontaina de Sergei, se fue a comprar una botella de vodka. Al cabo de media hora brindábamos la rubia moscovita, Sergei y un servidor por la victoria del camarada Ivanov. Después la fiesta se alargó, de ahí que este texto se escriba en la mañana resacosa del día de hoy, 19 de julio, mientras los ciclistas empiezan la primera etapa alpina. El alcohol me ha provocado sueños raros: Perico Delgado en la RAE, sillón "D" (mayúscula), Carlos de Andrés de vaquero en el Ampurdán (¿qué coño le pasa a este señor con las vacas? ¡vaya obsesión!), un enorme dragón retorciéndose sobre mi cabeza (uf, sólo era el tatuaje de esa puta chiquilla), una conspiración neocón para eliminar a un chaval de Pinto (Madrid). Ah, de anoche también recuerdo lo que nos reímos de los americanos, qué gilipollez la del Columbia, siguen tan chapuzas como hace cuarenta años, ¿la Luna? Armstrong no volverá a pisarla. Dicho por Pedro Delgado: "el momento en que alguien apreta..." Pero cuántos años lleva este hombre retransmitiendo el Tour y hablando así de mal para millones de personas?! No hay nadie en RTVE que le diga a este buen cristiano que se dice "aprieta" y no "apreta"?! Adjunto enlace a la conjugación de "apretar", ya que constituye un axioma que este caballero necesita repasarse la EGB. A Pedro Delgado, al Columbia y a la propaganda de EEUU les ocurre algo similar: quien mucho abarca, poco apreta.
Zalachenko
*****